San Pedro Sula, Honduras.
En el último clásico entre Marathón y Real España jugado en el estadio Yankel Rosenthal se vivió un episodio de violencia complicado cuando vándalos rompieron los portones e ingresaron a la cancha y armaron una batalla campal.
La Policía fue una de las responsables porque no dieron la seguridad necesaria al final del partido que terminó con una persona muerta en las afueras del inmueble. Es por eso que la Policía Nacional ha tomado medidas y han anunciado la presencia de 140 elementos que cuidarán el clásico sampedrano.
El jefe de la Policía Nacional en San Pedro Sula, el comisionado Carranza quien coordina la MEP-7, hizo una inspección de los portones de acceso, camerinos y todas las zonas que podrían crear conflicto en un partido de alto impacto y rivalidad.
Se formarán cinco anillos de seguridad desde las colonias aledañas al estadio donde revisarán que no haya acceso de la barra organizada del Real España, pues solo estará presente la barra del Marathón. 'No permitiremos actos vandálicos y tendremos equipos de reacción listos ante cualquier situación', dijo el comisario Carranza.
Desde las 11:00 de la mañana, los elementos de seguridad tomarán el control del estadio y así podrán asistir sin miedo las familias a disfrutar de un partido de fútbol que promete mucho. 'Nos han pedido que les demos mucha seguridad, pues los antecedentes del partido anterior no queremos que se repitan', sentenció Carranza.
