En la Copa de África femenina disputada en 2008, la futbolista fue acusada por diversos equipos rivales de ser un hombre, por lo que fue obligada a demostrar lo contrario de una forma dura para ella, desnudándose.
Ante las acusaciones de diversos equipos, la Confederación Africana de Fútbol decidió que Genoveva se desnudara para mostrar que realmente era una mujer, una vivencia que relató con mucho dolor.
'Me dijeron que me quitara toda la ropa ante de mi equipo (Guinea Ecuatorial) y de todos los trabajadores de la CAF. Me tocó la moral. Me enfadé mucho y finalmente rompí a llorar. Fue una situación totalmente humillante', explicó la jugadora tras cuatro años de silencio.
Además, la jugadora también reconoció haber vivido experiencias crueles y difíciles en su vida. 'Cuando tenía cinco años, en mi pueblo las chicas no me aceptaban porque quería jugar al fútbol, así que siempre solía jugar con los chicos', aseguró, apuntando que su padre 'no quería que tuviera nada que ver con el fútbol'.
'Mi madre quería que estudiara y me convirtiera en profesora, Y me dijo que no quería volver a verme. Con el tiempo, me fui a vivir con mi tío, que me llevó a la ciudad para que pudiera seguir estudiando y jugar al fútbol'.
La jugadora de 27 años, elegida en el once ideal de la última Copa del Mundo femenina en 2011, juega actualmente en el FFC Turbine Potsdam de Alemania, es figura de su selección y por primera vez se confesó ante las cámaras.
