Kiev, Ucrania.
El delantero galés Gareth Bale, se gastó este sábado uno de los mejores goles en la historia de las finales de la Champions League en el duelo entre Real Madrid - Liverpool disputado en el estadio Olímpico de Kiev, Ucrania.
Y es que tras haber comenzado el juego en el banquillo, el ariete ingresó al terreno de las acciones en el minuto 61 en lugar del volante Isco Alarcón y le respondió a Zidane de forma espectacular.
Al minuto 63 recibió un centro por parte del lateral Marcelo y Bale conectó la pelota de espaldas al arco con una chilena magistral en donde la pelota bañó al arquero del club inglés Karius. Una completa obra de arte, digna de una final de Champions.
Cabe señalar que diferentes medios españoles han señalado que el galés no quiso calentar al conocer que no jugaría de entrada.
