13/04/2024
11:30 PM

Terminator: destino oscuro; Rev-9, la máquina asesina del futuro

La cinta llega el 31 de octubre a las salas de cine del país.

Los Ángeles.

El exoesqueleto de Gabriel Luna tiene enormes expectativas que superar en las salas de cine como el aterrador Rev-9, la máquina asesina del futuro que es el principal antagonista en Terminator: destino oscuro (Terminator: Dark Fate).

Por supuesto, Arnold Schwarzenegger saltó a la fama como el T-800 en The Terminator (1984), mientras que Robert Patrick interpretó al aún más extraordinario T-1000 en Terminator: Judgment Day (1991). ¿Acaso Luna podrá estar a la altura de esos legendarios predecesores cuyo trabajo proyectó una sombra sobre las estrellas cíborg de las siguientes tres películas de Terminator?

“Intenté trabajar en ello a diario y hacía descubrimientos conforme se presentaban”, afirmó Luna. “Por supuesto, reconocí lo que funcionó (anteriormente) y lo incorporé en lo que yo estaba tratando de lograr, porque Arnold hizo un gran trabajo planteando esta idea, este terror y a este sorprendente villano en la primera cinta, y todos sabemos que Robert lo llevó al siguiente nivel en la segunda película”.

“Creo que tuvimos éxito, aunque dejaré que eso lo decida el público”, comentó. “Pero estoy muy orgulloso del trabajo que hice, así como el equipo de dobles de riesgo y todos los involucrados. Creo que las personas disfrutarán mucho al Rev-9”.

ESTRENO EN HONDURAS

La nueva película, que se estrenará en Honduras el jueves 31 de octubre y en Estados Unidos el primero de noviembre, marca el regreso de James Cameron, quien escribió y dirigió The Terminator y Judgment Day, pero no ha estado involucrado en ninguna de las cintas subsecuentes ni en el programa para televisión: Terminator: The Sarah Connor Chronicles (2008-2009). Cameron produjo y coescribió Dark Fate, pero le cedió la dirección a Tim Miller, mejor conocido por Deadpool (2016).

Luna, un texano de 36 años de ascendencia mexicana, venció a muchos actores para ganarse el papel de Rev-9. Es mejor conocido por la película Transpecos (2016) y programas como Matador (2014) y Agents of S.H.I.E.L.D. (2016-2017); en este último participa como el exaltado antihéroe Robbie Reyes, alias Ghost Rider.

TERMINATOR1

Natalia Reyes como heroína y Gabriel Luna como un nuevo Terminator aportan un vital sabor hispano a esta famosa saga de acción.

Dark Fate se desarrolla casi tres décadas después de los sucesos de Judgment Day, cuando Skynet envía al pasado al Rev-9, su Terminator más reciente y letal, para asesinar a Dani Ramos (Natalia Reyes), a la mezcla de humano y cíborg Grace (Mackenzie Davis) y a sus amigos. Luego aparece la inigualable Sarah Connor (Linda Hamilton), quien recurre a la ayuda de un personaje inverosímil, el T-800 (Schwarzenegger), que ahora prefiere que le llamen Carl. Juntos combaten al Rev-9 en un esfuerzo por salvar a Dani… y al mundo entero.

“No puedo revelar mucho acerca de la historia, pero tienes a un Terminator con una orden y tienes a los héroes tratando de eludirlo”, explicó Luna, en una entrevista telefónica desde Los Ángeles. “Se trata de una hermosa explosión de acción y combate. Es muy emocionante. Está hecha a la antigua, pero por supuesto, aumentada”.

“Las primeras dos cintas fueron… paseos”, comentó. “Estabas en la patrulla con Arnold mientras perseguía a Sarah Connor en la primera. En la segunda, estabas en la plataforma o en la motocicleta con Arnold. Te movías todo el tiempo con la historia. Para nosotros era importante seguir en ese tono”.

“En lo que concierne a los viajes en el tiempo, el aspecto de la física y la ciencia, todo eso es una capa brillante que recubre todo”, añadió Luna. “La película original fue revolucionaria, todo el concepto. Creo que lo que hicimos fue volver a una realización cinematográfica más lineal, muy fuerte, de avance rápido”.

EXIGENCIAS

El robot/máquina Rev-9 combina los elementos del T-800 y el T-1000, está hecho a base de carbono, en color negro mate y en un empaque de metal líquido. Lo que lo distingue de sus predecesores es que el Rev-9 puede dividirse, generando el doble de Terminators por el precio de una entrada al cine.

Por supuesto, el Rev-9 debe tener un talón de Aquiles para no ser absolutamente imparable.

¿El pronombre masculino será correcto? ¿Cuál usaría Luna para referirse al Rev-9?

“Soy eso”, respondió el actor sin titubear.

Interpretar al personaje como una “cosa” le exigió a Luna afrontar el carácter físico de la máquina. Al trabajar con Miller, así como con su entrenador y equipo de dobles de acción, Luna tuvo que esforzarse para lograr un físico superior y moverse como el Rev-9 de formas que fueran tanto fluidas como robóticas. También trabajó en no reflejar ninguna emoción.

“Fue un proceso muy técnico en ese sentido”, explicó Luna. “Simplemente tienes que moverte por el mundo, abrirte paso y ser lo más eficaz posible. Estás absorbiendo todo de una vez, tratas de mantener una mirada imprecisa, ver con la visión periférica y pensar como una máquina”.

“No tengo forma de recrear esa experiencia en la vida real usando este tipo de personaje”, comentó. “No puedes hacerlo. Puedes salir, vivir una experiencia y utilizarla después, pero este fue un ejercicio que mi imaginación había acumulado a lo largo de treinta y tantos años de existencia de la historia (de “Terminator”) y esta mitología. Traté de utilizar todo eso”.

TERMINATOR2

El actor Gabriel Luna, al que el público ha podido ver en la serie 'Agents of S.H.I.E.L.D.' o la película 'Transpecos' (2016), destacó la responsabilidad que sienten por poder abrir caminos para los latinos con esta cinta.

Luna aseguró que Hamilton fue “la razón por la que iba a ver esta película cuando escuché que iban a rodarla”, y señaló que fue muy emocionante llegar a conocerla.

En lo que respecta a Schwarzenegger, según el actor, siempre fue uno de sus héroes, un hombre que ha conquistado la cima y prácticamente todos los ámbitos en los que ha incursionado”. “Una de las perlas de sabiduría que compartimos (que fue algo que supe de forma instintiva al ver las películas y que supe que le dio efectividad a su actuación) fue su carácter natural”, afirmó Luna. “Eso fue algo que me inculcó y que se conjugó con lo que yo ya estaba tratando de hacer, la idea de que todo se da de forma natural… y así debe ser”.

INICIOS

Luna lleva 15 años ejerciendo una carrera que jamás planeó tener. Su padre falleció antes de que él naciera y su madre lo alentó a dedicarse al fútbol, al basquetbol y a las carreras de pista. Le ofrecieron algunas becas deportivas y casi se comprometió a estudiar negocios en la Universidad de Texas.

Luego se dislocó el hombro jugando fútbol americano. “Estaba probando de todo, tratando de dilucidar qué quería hacer”, narró. “Estaba en una clase de escenotecnia construyendo escenarios, blandiendo un martillo y tratando de obtener mi crédito de artes plásticas. Luego el profesor Sharp me dijo que estaban preparando una obra y me preguntó si quería hacer una audición”.

“Le respondí que yo no podía hacer eso”. Usé como pretexto que tenía que ir a mi entrenamiento, que era verdad, o más o menos. Aunque estaba lastimado, seguía asistiendo al entrenamiento. Él pareció decepcionado”.

Luna regresó a casa, donde recibió una llamada de su abuela. Le dijo: “Tengo una caja”. Esa caja contenía artículos de su padre, incluyendo trofeos y una cinta en VHS. “La vimos y en ella aparecía mi padre en una obra de teatro que protagonizó y escribió para la época de Pascua en nuestra iglesia ocho meses antes de mi nacimiento”, recordó. “Yo estaba abrumado porque era la primera vez que lo veía vivo, hablando y moviéndose. Una vez que digerí el momento, pensé: ‘Tengo que intentar lo que me pidió Sharp’. Me había negado por miedo, pero de repente ya no sentía miedo”.

“Lo intenté y me dio una escena en la que un hombre está de pie frente a dos tumbas sin nombre, y le pregunta a una anciana cuál es la de su padre”, narró. “Recuerdo haber pensado: ‘Esta es mi primera clase de actuación. Vaya, ya sé qué es esto. Sé lo que se siente’”.

“Hasta la fecha, ese es un gran aspecto para tratar de ser exitoso en este trabajo”, dijo el actor.

“Una mujer la vio y me dio una beca de 75,000 dólares para ser actor e ir a la Universidad de St. Edward en Austin. Y todo comenzó ahí”.