A más de 500 kilómetros de distancia de La Tierra, el minilaboratorio 'Philae' se desprendió de la nave espacial Rosetta y se posó con éxito en el cometa 67P/Tschurjumow-Gerassimenko. Al principio 'Philae' tuvo algunos problemas con el anclaje, pero eso no parece que vaya a afectar a la misión.
A partir de ahora, los científicos podrán explorar el pasado más profundo del universo, ya que los cometas tienen cientos de miles de años y proceden de los tiempos del inicio de nuestro Sistema Solar.
Durante el proceso de aproximación al cometa los expertos ya descubrieron algunas cosas: el cometa huele a huevos podridos y a establo, es más oscuro que una carbonera y terriblemente frío.
El primer aterrizaje en un cometa fue festejado por los astrónomos como un hito en la navegación espacial, similar al de la llegada del hombre a la luna en 1969.
'Nuestra ambiciosa misión Rosetta se ha asegurado un lugar en los libros de historia', afirmó el director general de la Agencia Espacial Europea (ESA), Jean-Jacques Dordain. 'Con Rosetta abrimos la puerta al origen del planeta Tierra y fomentaremos una mejor comprensión de nuestro futuro', agregó.
La sonda Rossetta emprendió viaje hace diez años, tiempo en el cual recorrió más de 6.400 millones de kilómetros. Su lanzamiento tuvo lugar el 2 de marzo de 2004 por un cohete Ariane 5 desde la estación de Kourou, en la Guayana francesa, con el 'Philae' a bordo.
Ahora por fin llegó a su destino. Sin embargo, el trabajo no ha hecho más que empezar. Los científicos esperan expectantes los secretos que conseguirán extraer del cometa 67P/Tschurjumow-Gerassimenko.
Composición del suelo, temperatura o composición del núcleo del cometa, todo es de gran interés. Los investigadores buscan dar respuesta a eternas preguntas: 'No es más bien la pregunta: ¿De dónde venimos? en lugar de ¿hacia dónde vamos?', indica Stephan Ulamec, director del proyecto 'Philae' en el Centro Alemán de Navegación Espacial (DLR) en Colonia.
'Todo lo que recibimos es una mina para los científicos', aseguró la portavoz del DLR, Manuela Braun. 'El cometa procede de una región especialmente fría y ha conservado la materia originaria como en una nevera', explicó
