Riad.
Más de un millón de musulmanes de todo el mundo emprenden el 2 de octubre la tradicional peregrinación a La Meca, la más importante de las ciudades santas del islam. Según la religión musulmana, La Meca, en Arabia Saudí, es la ciudad natal del profeta Mahoma, el fundador de esta religión.
La peregrinación a La Meca se llama haj (lo que significa peregrinación en árabe) y es el quinto de los cinco pilares del islam, es decir, las cinco reglas que todo buen musulmán tiene que cumplir. Estas reglas dicen que todo musulmán que tenga el dinero suficiente y esté sano debe peregrinar a La Meca una vez en la vida.
Los otros cuatro pilares son la profesión de la fe, la oración, dar limosna y el ayuno.
La parte más importante de la peregrinación es el ascenso al cercano monte Arafat para orar y, al día siguiente, la simbólica lapidación del diablo, que se le apareció a Abraham (en árabe Ibrahim) en el cercano valle de Mina.
Después, los fieles se dirigen a la Gran Mezquita de La Meca para dar varias vueltas a la Kaaba, una construcción en forma de cubo cubierta por una tela negra en la que se encuentra la Piedra Negra, una importante reliquia del islam. Hacia la Kaaba dirigen siempre los musulmanes sus oraciones.
El final de la peregrinación a La Meca lo marca la fiesta del sacrificio ('Eid al-Adha'), en la que los musulmanes sacrifican un cordero y luego celebran una comida con la familia y los amigos. Con ello recuerdan la disposición de Abraham de sacrificar a su propio hijo a petición de Dios. dpa
Más de un millón de musulmanes de todo el mundo emprenden el 2 de octubre la tradicional peregrinación a La Meca, la más importante de las ciudades santas del islam. Según la religión musulmana, La Meca, en Arabia Saudí, es la ciudad natal del profeta Mahoma, el fundador de esta religión.
La peregrinación a La Meca se llama haj (lo que significa peregrinación en árabe) y es el quinto de los cinco pilares del islam, es decir, las cinco reglas que todo buen musulmán tiene que cumplir. Estas reglas dicen que todo musulmán que tenga el dinero suficiente y esté sano debe peregrinar a La Meca una vez en la vida.
Los otros cuatro pilares son la profesión de la fe, la oración, dar limosna y el ayuno.
La parte más importante de la peregrinación es el ascenso al cercano monte Arafat para orar y, al día siguiente, la simbólica lapidación del diablo, que se le apareció a Abraham (en árabe Ibrahim) en el cercano valle de Mina.
Después, los fieles se dirigen a la Gran Mezquita de La Meca para dar varias vueltas a la Kaaba, una construcción en forma de cubo cubierta por una tela negra en la que se encuentra la Piedra Negra, una importante reliquia del islam. Hacia la Kaaba dirigen siempre los musulmanes sus oraciones.
El final de la peregrinación a La Meca lo marca la fiesta del sacrificio ('Eid al-Adha'), en la que los musulmanes sacrifican un cordero y luego celebran una comida con la familia y los amigos. Con ello recuerdan la disposición de Abraham de sacrificar a su propio hijo a petición de Dios. dpa
