¿Cómo manejar la rivalidad entre hermanos?

La rivalidad y la competencia por el amor y atención de sus padres ocasionan celos, pero existen padres que generan diferencias innecesarias entre sus hijos

  • 13 jul 2018

Ningún niño está preparado para recibir a un hermano que le haga perder la exclusividad, y cuando esto sucede es natural que los padres, inicialmente la madre, tengan que dividir su cariño y su afecto. Así, para el pequeño se presenta lo inevitable: ya no tendrá la total atención de sus papás, lo cual despierta rivalidad, celos y deja indelebles huellas psíquicas en sus afectos hacia el hermano.

Existen padres que generan diferencias innecesarias entre sus hijos y también hay padres que intentan encubrir las naturales diferencias. Ambos extremos son inadecuados, ya que cada hermano es un ser único y merece recibir un trato especial. Para que los celos normales entre hermanos no se intensifiquen, los padres pueden incentivar el compañerismo entre hermanos, tratando de evitar tener actitudes que puedan provocar celos.

Así, él cree que le darán más atención y para captarla puede tornarse agresivo, deprimido o desobediente. También, interrumpir las conversaciones de sus padres o mostrarse más sensible o llorón, con dificultad para concentrarse, para prestar atención, lo que le puede llevar a una alteración en el rendimiento escolar.

Hay otros niños que van más allá y manifiestan síntomas físicos, como dolores de cabeza, estómago, piernas, que pueden ser fingidos o no y en estos casos es necesario vigilarle más de cerca, pero en ningún caso, hay que cerrar los ojos, hay que prestar atención e intentar hacerle comprender, recordándole que es el hijo mayor y que tiene más capacidad de comprensión que su hermano.

Cuando existe una discusión entre hermanos, si es leve, lo mejor es no intervenir ya que estos altercados sirven para aprender a solucionar sus conflictos por el diálogo, claro que si la cuestión pasa a mayor grado, es necesario intervenir. Para todo niño, es difícil dejar de ser el sol para ser una estrella más en el universo de su casa.

Sugerencias para los padres

¿Cómo ayudar al primogénito?
-Reconocer el sentimiento celoso como algo natural
-Ser tolerante con las regresiones.
-Darle la oportunidad de expresar su malestar.
-Contarles las vivencias personales con los hermanos cuando eran pequeños.
-Atender con interés sus éxitos.
-Transmitir que se le quiere.
-Enfatizarle las ventajas de ser mayor.


Lo que deben evitar es:
-Ocultar el sentimiento amoroso hacia el nuevo bebé.
-Hacer comparaciones entre sus hijos.
-Manifestar preferencia por alguno.
-Intervenir prematuramente en las peleas. Por ejemplo, por los juguetes.
-Hacerle prometer al hijo mayor que se portará bien.

Si el primogénito continúa manifestando celos enfermizos es probable que necesite ayuda profesional
La familia trastornada
Cuando los celos son anormales y la familia no sabe cómo afrontar la situación, se desequilibran las estructuras y todos los miembros terminan alterados. Los padres se dan cuenta de que es una situación que se les escapa de las manos y suelen cometer el error de centrar su atención sobre el celoso, con lo cual multiplican el problema ya que toda conducta que recibe atención tiende a incrementarse.
Las pautas más recomendadas para que estas situaciones extremas no lleguen a aparecer en el niño es hacer prevención antes de la llegada de un nuevo miembro. Hay muchas formas de ayudar a entender a los niños que van a tener un hermano.

Los papás pueden desde crear expectativas favorables sobre cómo va a ser su vida con la llegada del nuevo hermano, hasta leerle cuentos con el propósito de crear en el niño la ilusión de que dentro de poco va a tener un nuevo compañero de juegos y aventuras.