Los accesorios de la abuela siguen de moda

Lentes de pasta, pendientes grandes y diademas recargadas conforman el estilo “granny” de hoy

  • 19 abr 2017

Las perlas, los lentes de pasta y los pendientes XXL, completos característicos de la estética “granny”, son ahora tendencia para la temporada de primavera, gracias a la calle que, secundada por las semanas de la moda, ha convertido los accesorios de la abuela en el “must” de la nueva estación.

Las pasarelas internacionales presentaron unas propuestas de complementos muy variadas, que van desde los accesorios con personalidad hasta la más absoluta austeridad, en desfiles donde los complementos brillaron por su ausencia.

Las citas con la moda en París, Milán, Nueva York o Madrid, consolidaron esta sobriedad como una de las claves para la nueva estación, en las propuestas de Chloé o Victoria Beckham, que decidieron dejar todo el protagonismo de los estilismos a las prendas.

El extremo opuesto lo ocupó la firma francesa Koché, que llevó los accesorios al terreno de lo unisex y les dio volumen y protagonismo en forma de los anillos grandes tipo sello y de oro, mismo material que hizo brillar los amplios colgantes y los pendientes largos, que también se vieron en “looks” para ambos sexos.

Aritos maxi y las vinchas.

Accesorios. Los aritos XXL, accesorio clave para primavera. Los pendientes estuvieron presentes en gran parte de los desfiles, con tres variaciones principales: las formas geométricas, los asimétricos y la versión más urbana, los aros, finos y de metal, que tuvieron una presencia destacable en colecciones como la de Kendall + Kylie, o Zimmermann, que optó por unos aros más anchos y en colores vivos.


La firma neoyorquina Rodarte fue una de las pocas en introducir los pendientes joya, con un cierto carácter barroco, a juego con los ganchos de pelo y las diademas, la cara tradicional de los accesorios para el pelo, que se han reinventado gracias a las cintas, colocadas en la frente, justo en el nacimiento del cabello.

Los pañuelos, que en ediciones anteriores se convirtieron en el accesorio capilar por excelencia, han pasado ahora a reservarse al cuello, como han demostrado Monique Lhuillier, J. Crew o Roberto Torretta, que han recurrido a telas de distintos tamaños, motivos y colores para adaptar esta tendencia a sus dispares estilos.

Los pañuelos y lentes de sol extragrandes forman parte de la tendencia.
Algo similar ha ocurrido con los “chokers” o gargantillas, que inundaron los estilismos de colecciones anteriores y, ahora, dejan paso a los collares tradicionales que han vuelto en formar cadenas o perlas que rodean el cuello justo por encima de las clavículas en la propuesta de Alexander Wang, o caen por el escote con grandes colgantes, como los que diseñó Marc Jacobs.