La rutina de cuidado facial puede ser tan compleja o tan sencilla como exijan las necesidades de cada tipo de piel; pero se resume en tres pasos básicos e imprescindibles: limpieza, hidratación y protección solar.
Otros puntos claves
Lave su rostro por las noches. La experta señala que debe ser obligatorio limpiar el rostro por las noches. Si su piel no es grasa, puede hacer la rutina de limpieza a fondo solo una vez al día con dermolimpiadores. Es decir, en las mañanas solo enjuagar con agua.
Filtros para cada tipo de piel. En el mercado hay cualquier cantidad de filtros solares, para piel grasa con tendencia a acné, piel sensible, pieles con rosácea, sensibles o secas, con melasma (manchas) e incluso para niños. Busque uno según su piel.
Maquillaje con filtro solar. El maquillaje con filtro solar es un gran aliado. Puede aplicarse el filtro en crema o gel por la mañana y retocar durante el día con este tipo de productos de doble función.
Limpieza
“Esto es debido a que el pH de la piel es ligeramente ácido (4.5-5.75) y al colocarnos un jabón alcalino estamos al
terando nuestra barrera cutánea, lo que nos puede provocar problemas en nuestra piel.
En la actualidad hay en el mercado diversos dermolimpiadores que son específicos para cada tipo de piel: grasa con tendencia a acné, seca, sensible, atópica, con rosácea e incluso los hay con despigmentantes. Es necesario determinar su tipo de piel con un dermatólogo para que le indique un dermolimpiador adecuado”, apunta.
Chinchilla sugiere complementar el proceso con dos productos más: exfoliantes y soluciones para limpieza diaria como el agua micelar y las soluciones lipídicas. “Los exfoliantes pueden contener componentes químicos o físicos. Los químicos son aquellos que contienen algunos componentes como los alfa hidroxiácidos (ácido glicólico, ácido láctico, ácido cítrico) y beta hidroxiácidos (ácido salicílico). Estos ácidos aceleran la renovación natural de la piel, eliminando las capas más superficiales de esta y dándole mayor luminosidad e hidratándola.
Los componentes físicos son esas partículas que se sienten como gránulos para poder frotarlos en nuestra piel y de esa manera remover impurezas”, explica.
La correcta elección dependerá de su tipo de piel y su tolerancia. Por ejemplo, las pieles sensibles pueden irritarse mucho con los ácidos o con los componentes físicos.
Hidratación, un básico del cuidado
- Proceso. Según la especialista, debe hidratar no solo el rostro, sino también el contorno de ojos, labios y cuello.
- Ingredientes. Hay una gran variedad de hidratantes. Los antienvejecimiento suelen componerse, por ejemplo, de retinoides, alfa hidroxiácidos, resveratrol, entre otros; sin embargo, no todas las pieles toleran ingredientes como los retinoides.
- Rutina. Este paso debe hacerse dos veces al día: por las mañanas después del baño y por la noche después de la limpieza.
Protección solar
sino también de la luz azul (luz visible) y rayos infrarrojos. Con la nueva modalidad de trabajo nos estamos exponiendo más a las pantallas. También recuerde que el protector solar debe colocarse cada dos a tres horas, independientemente del FPS”.