Si tus hijos han comenzado su período escolar, ayúdales a obtener los nutrientes que necesitan para tener un buen rendimiento académico.
La regla de oro en el armado de la lonchera es incluir una porción adecuada de los principales grupos alimenticios. Los criterios de selección: la preferencia de sabores de tus niños, el atractivo visual y la facilidad de transporte.
“Con el gran porcentaje de obesidad infantil que tenemos en el País es súper importante promover el consumo de verduras. Para el lunch deben contemplarse los tres principales grupos de alimentos: verduras y frutas; cereales y leguminosas y proteínas o productos de origen animal”, explica Fernanda Gama, nutrióloga.
“A veces recurrimos mucho a juguitos, aguas de sabor muy endulzadas o refrescos. La mejor opción es agua de fruta natural con poco o nada de azúcar. El paladar de los niños no está pidiendo algo dulce, ellos se acostumbran al dulzor de la comida que les damos”.
Es práctico y está bien echar mano de algunas opciones rápidas, como barras de amaranto y pan integral; también se vale incluir botanas saludables, como palomitas naturales, palanquetas de frutos secos o nueces.
La hora del recreo es una buena oportunidad para fomentar los buenos hábitos alimenticios y para introducir nuevos productos en la dieta.
Para tener una buena concentración durante las clases, el refrigerio que los niños comen entre campana y campana es esencial. Encuentra algunos tips para enviar en la lonchera:
Variedad
- Cambia el tipo de pan. Hay de varios tipos de grano, un día puede ser de caja, otro día un bolillo o pan integral.
- Para hacer más atractivos los sándwiches y pasar tiempo con tus hijos, prepáralos con ellos y permite que los corten de formas que les parezcan divertidas.
- Hay moldes de figuras geométricas, corazones y más.
Tiempos
- Si por otros planes, en tu día libre no pudiste preparar los alimentos, puedes hacerlo poco a poco en la noche mientras cenas. Tus hijos pueden ayudarte si juegan mientras lo hacen.
- El día de educación física puedes mandarles algo un poco más dulce, como un sándwich de nutella, porque gastarán más energía.
- Evita que tu hijo coma desde pequeño demasiados productos endulzados. El paladar se acostumbra a ingerir ciertas cantidades de azúcar y con el tiempo necesitará cantidades más grandes para captar el dulzor.
Algunos consejos
-Incluye aquellos alimentos que sean seguros a temperatura ambiente como pan integral, frutas enteras, quesos, nueces, palomitas de maíz con poca grasa y sal.
-De preferencia evita alimentos que se derritan con facilidad o que puedan descomponerse rápidamente (gelatinas y flanes).
-Cuando mandes alimentos que se tengan que conservar calientes, procura mantenerlos en recipientes térmicos para que mantengan su temperatura.
-Empaca adecuadamente los alimentos en recipientes prácticos, limpios y seguros.
La regla de oro en el armado de la lonchera es incluir una porción adecuada de los principales grupos alimenticios. Los criterios de selección: la preferencia de sabores de tus niños, el atractivo visual y la facilidad de transporte.
“Con el gran porcentaje de obesidad infantil que tenemos en el País es súper importante promover el consumo de verduras. Para el lunch deben contemplarse los tres principales grupos de alimentos: verduras y frutas; cereales y leguminosas y proteínas o productos de origen animal”, explica Fernanda Gama, nutrióloga.
“A veces recurrimos mucho a juguitos, aguas de sabor muy endulzadas o refrescos. La mejor opción es agua de fruta natural con poco o nada de azúcar. El paladar de los niños no está pidiendo algo dulce, ellos se acostumbran al dulzor de la comida que les damos”.
Es práctico y está bien echar mano de algunas opciones rápidas, como barras de amaranto y pan integral; también se vale incluir botanas saludables, como palomitas naturales, palanquetas de frutos secos o nueces.
La hora del recreo es una buena oportunidad para fomentar los buenos hábitos alimenticios y para introducir nuevos productos en la dieta.
Para tener una buena concentración durante las clases, el refrigerio que los niños comen entre campana y campana es esencial. Encuentra algunos tips para enviar en la lonchera:
Variedad
- Cambia el tipo de pan. Hay de varios tipos de grano, un día puede ser de caja, otro día un bolillo o pan integral.
- Para hacer más atractivos los sándwiches y pasar tiempo con tus hijos, prepáralos con ellos y permite que los corten de formas que les parezcan divertidas.
- Hay moldes de figuras geométricas, corazones y más.
Tiempos
- Si por otros planes, en tu día libre no pudiste preparar los alimentos, puedes hacerlo poco a poco en la noche mientras cenas. Tus hijos pueden ayudarte si juegan mientras lo hacen.
- El día de educación física puedes mandarles algo un poco más dulce, como un sándwich de nutella, porque gastarán más energía.
- Evita que tu hijo coma desde pequeño demasiados productos endulzados. El paladar se acostumbra a ingerir ciertas cantidades de azúcar y con el tiempo necesitará cantidades más grandes para captar el dulzor.
Algunos consejos
-Incluye aquellos alimentos que sean seguros a temperatura ambiente como pan integral, frutas enteras, quesos, nueces, palomitas de maíz con poca grasa y sal.
-De preferencia evita alimentos que se derritan con facilidad o que puedan descomponerse rápidamente (gelatinas y flanes).
-Cuando mandes alimentos que se tengan que conservar calientes, procura mantenerlos en recipientes térmicos para que mantengan su temperatura.
-Empaca adecuadamente los alimentos en recipientes prácticos, limpios y seguros.
 El día de educación física puedes mandarles algo un poco más dulce, como un
sándwich de nutella, porque gastarán más energía.
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