Lo que debes saber para ser una buena anfitriona

El anfitrión tiene la misión de recibir, acoger, atender y despedir a sus invitados

Las reuniones de amigos y familiares se presentan. Ser una buena anfitriona requiere mucho más que una casa grande decorada con las últimas tendencias.

“El anfitrión tiene la misión de recibir, acoger, acomodar, atender y despedir a sus invitados”, explica el especialista en Protocolo Social y Etiqueta en Redscreen, Design&Protocolo, Miguel del Amo.

El arte de hacer una velada agradable consiste en cuidar los detalles y tener todo listo antes de que los invitados toquen al timbre y los recibas con alegría y una gran sonrisa. Evita alargar los saludos en la puerta, no es muy cómodo y puede violentar a otros invitados.

El recibimiento a los invitados no debe de alargarse más de treinta minutos, la puntualidad es clave a la hora de organizar un evento en el domicilio.


El anfitrión recibe y despide a los invitados. “Es imprescindible recibir y presentar a todos los invitados cuando llegan al domicilio, además de “hablar con todos los invitados y nunca dedicar más tiempo a unos que a otros, es una clara falta de cortesía”, explica Miguel del Amo.

Si hay dos anfitriones se repartirán la tarea de recibir y acomodar a sus invitados. Una vez superados la media hora de cortesía, los anfitriones se ocuparán de sus invitados y alguien de confianza ocupará su lugar con los más rezagados.

Si entre los invitados acude una persona que es una relevante personalidad y ya sabemos quién es, no necesita presentación. “Todos los demás invitados le serán presentados”.

En cuanto a las presentaciones hay que recordar que “se presenta a cada persona con un protocolo determinado. Se entiende que la mujer va delante del hombre y se la introduce primero en la reunión; mientras que el adulto tiene más entidad que una persona joven”, explica del Amo.

Según el protocolo, el saludo le corresponde iniciarlo a la mujer, que tenderá su mano al hombre, y la persona de mayor edad a la menor. Todos los invitados, sin excepción, irán siendo presentados según van llegando al domicilio.

Para favorecer la conversación entre ellos, además de dar el nombre y apellido podemos añadir la profesión e incluso incluir en la presentación alguna de las aficiones del invitado, siempre que sea interesante.
Si entre los invitados hay un invitado de honor, se le presentará a todos los asistentes.

Un buen anfitrión mima los detalles
1. A la hora de elaborar un menú, se debe pensar que sea del agrado de todos los comensales. Se deben evitar platos demasiado elaborados o exotismos “difíciles de digerir.

2. Es importante conocer si hubiera algún invitado diabético o alérgico o intolerante a algún alimento, así como vegetarianos o veganos.

3. No debe pasar por alto la decoración de la mesa. Flores, velas, vajilla, cubertería y detalles protocolarios y por supuesto, comprobar que mantelería y cristalería están en perfecto estado.

4. En la mesa se debe intercalar a los invitados y separar a los matrimonios para favorecer la conversación entre los comensales.

5. El aperitivo previo, juega un papel fundamental en este aspecto, es el momento en el que los invitados socializan entre sí.

6. Es mejor tomar el aperitivo de pie para que los invitados charlen mientras que van llegando los más rezagados.