Tips para escoger la máscara perfecta 

Haz la selección correcta y dales el uso adecuado para no sufrir las consecuencias.

Redacción. La belleza de las pestañas es vital para lograr una mirada impactante. El rizado y el uso del rímel ayudan a cambiar el aspecto general del ojo, pues lo dotan de gran expresividad.

En estos momentos hay una amplia variedad de máscaras de pestañas. Vinicio Conti, diseñador de imagen, divide en tres grandes tipos las disponibles en el mercado. Señala que hay con base de agua, aceite y gel.

“La primera tiene en su contra que se corre fácilmente, pero a la vez es sencillo retirarla. La segunda frecuentemente es resistente el agua. El último tipo por lo general es incoloro. Solo separa y da definición a las pestañas”, explica. El especialista señala que la elección deberá depender de los resultados deseados y de situaciones externas, como el clima.

“Los productos a prueba de agua son buenos para quien está expuesta a temperaturas extremas, quien no tiene tiempo para retocarse o quien va a nadar”.

Un adelanto que Conti quiere destacar son las máscaras de extensión. En su fórmula llevan microfibras que se adhieren a las pestañas y las alargan de manera inmediata.

El efecto es asombroso, pero hay que tener especial cuidado al retirarlas antes de dormir para prevenir problemas, como infecciones o irritación.

Algunos consejos

1. Hay mitos sobre productos para alargar las pestañas. Por ejemplo, el aceite de almendras, pero no se ha comprobado científicamente que sirva para ese fin.

2. Humecta tus pestañas diariamente con aceites naturales o un producto cosmético creado para ese fin, como el de ricino. Sirven bien para lubricar.

3. Calienta solo un poco la pinza antes de rizar. Si tus pestañas se vuelven a alaciar al ponerles rímel, prueba una fórmula a prueba de agua y se resuelve el problema.

4. Evita usar cantidades excesivas de rímel. Si quieres que tus pestañas se vean más largas, mejor busca un producto que contenga fibras de nailon.

5. Procura no bombear el aplicador en el envase, pues hace que el producto se reseque. Si han pasado de 3 a 6 meses y no se ha terminado un rímel, tíralo.

6. Desmaquilla tus pestañas completamente cada noche. El rímel endurece el pelo y lo hace tan frágil que puede romperse en trozos.