Redacción. Si tienes obsesión por la limpieza y no soportas que tu dedo quede manchado de polvo o que tu ropa se percuda, puedes recurrir a fáciles trucos que te permitirán dejar atrás tu obsesión, pues le garantizan el resultado que buscas.
Limpieza fácil
-Utiliza trapos de microfibra. Su composición de poliéster y nylon, te permite atrapar fácilmente el polvo, absorber líquidos y no deja pelusas ni atrapa mal olor. Los encuentras en varias tiendas de autoservicio.
-Ten presente que hay sitios y muebles que se pueden limpiar sin agua o detergente, o que por más que éstos se usen es imposible dejarlos totalmente limpios.
-Lee las etiquetas de los productos de limpieza y úsalos tal como dice el fabricante. Incluso puedes utilizar menos producto del indicado y ver el resultado, pero nunca más porque es probable que requieras de más agua para enjuagarlo.
-Evita dejar el producto de limpieza en contacto con los materiales, enjuaga bien a menos que el producto te indique que debe estar en contacto un tiempo específico. Si lo dejas por más tiempo tus muebles se pueden opacar o quedar con restos de suciedad que no se enjuagó.
Ropa limpia
-No basta leer la etiqueta de cada prenda para conocer las indicaciones de lavado, hay que seguirlas.
-Antes de lavarla, clasifícala en dos grupos principales: clara y obscura; y después, cada uno en dos pequeños grupos: muy sucia y menos sucia.
-No hagas una carga por cada uno de esos grupos, la idea es darle un tratamiento previo a la más sucia: quitarle manchas con los productos adecuados, dejarla remojando un día antes en agua fría sin ningún detergente. Una vez hecho este proceso puede lavar, ya sea toda la ropa clara o toda la obscura en una sola carga.
-Procura utilizar sólo el detergente (en polvo o líquido) necesario, así no utilizas más agua para enjuagar y tampoco corres el riesgo de que se queden restos de detergente en las prendas, lo que provoca que se percudan. Además, si es de piel sensible, puede ver dañada su piel.
-Para ropa obscura, de lana, seda o de bebé prefiere el detergente líquido, son prendas que no requieren productos tan alcalinos y sí neutros.
-Lava con agua fría para que no se altere el tamaño de las prendas.
¿Sabías?
Las manchas de vino tinto se quitan con vino blanco y las de tinta de bolígrafo, con alcohol.
Pero ¡cuidado! hay que quitar la mancha por el revés y después poner algo que absorba lo que salga de la mancha. Límpiala de afuera hacia el centro intentando hacerla más chiquita.
Fuente: Lourdes Souza, responsable del área de servicios de la Escuela de Administración de Instituciones, en la Universidad Panamericana.
 Utiliza de preferencia trapos de microfibra.
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-Utiliza trapos de microfibra. Su composición de poliéster y nylon, te permite atrapar fácilmente el polvo, absorber líquidos y no deja pelusas ni atrapa mal olor. Los encuentras en varias tiendas de autoservicio.
-Ten presente que hay sitios y muebles que se pueden limpiar sin agua o detergente, o que por más que éstos se usen es imposible dejarlos totalmente limpios.
-Lee las etiquetas de los productos de limpieza y úsalos tal como dice el fabricante. Incluso puedes utilizar menos producto del indicado y ver el resultado, pero nunca más porque es probable que requieras de más agua para enjuagarlo.
-Evita dejar el producto de limpieza en contacto con los materiales, enjuaga bien a menos que el producto te indique que debe estar en contacto un tiempo específico. Si lo dejas por más tiempo tus muebles se pueden opacar o quedar con restos de suciedad que no se enjuagó.
 Utiliza la cantidad de producto necesario, lee bien el reverso de los botes y lee bien las instrucciones.
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Ropa limpia
-No basta leer la etiqueta de cada prenda para conocer las indicaciones de lavado, hay que seguirlas.
-Antes de lavarla, clasifícala en dos grupos principales: clara y obscura; y después, cada uno en dos pequeños grupos: muy sucia y menos sucia.
-No hagas una carga por cada uno de esos grupos, la idea es darle un tratamiento previo a la más sucia: quitarle manchas con los productos adecuados, dejarla remojando un día antes en agua fría sin ningún detergente. Una vez hecho este proceso puede lavar, ya sea toda la ropa clara o toda la obscura en una sola carga.
-Procura utilizar sólo el detergente (en polvo o líquido) necesario, así no utilizas más agua para enjuagar y tampoco corres el riesgo de que se queden restos de detergente en las prendas, lo que provoca que se percudan. Además, si es de piel sensible, puede ver dañada su piel.
-Para ropa obscura, de lana, seda o de bebé prefiere el detergente líquido, son prendas que no requieren productos tan alcalinos y sí neutros.
-Lava con agua fría para que no se altere el tamaño de las prendas.
¿Sabías?
Las manchas de vino tinto se quitan con vino blanco y las de tinta de bolígrafo, con alcohol.
Pero ¡cuidado! hay que quitar la mancha por el revés y después poner algo que absorba lo que salga de la mancha. Límpiala de afuera hacia el centro intentando hacerla más chiquita.
Fuente: Lourdes Souza, responsable del área de servicios de la Escuela de Administración de Instituciones, en la Universidad Panamericana.
