Tegucigalpa, Honduras
La reunión de los actores políticos comenzó puntualmente, a las tres de la tarde, en la sede de las Naciones Unidas, pero al filo de las seis de la tarde Garafulic salió para anunciar a los medios que el encuentro se suspendía sin precisar si se retomará en los próximos días.
“Lo que ha pasado es que ellos (Partido Nacional y Gobierno) no aceptan tres sillas ni seis, ellos quieren cuatro, esa es la verdad y quieren buscar excusas para salirse del diálogo”, acusó.
La intransigencia y la marcada polarización que sigue primando en las fuerzas políticas del país impidió ayer un acuerdo para la instalación de la primera reunión formal del diálogo nacional, con lo cual el proceso quedó en punto muerto.
El representante de las Naciones Unidas, Igor Garafulic, se vio obligado a suspender la reunión en la que se definiría la fecha para el inicio del ejercicio ante el ambiente caldeado y el intercambio de insultos entre los representantes del partido Nacional y del excandidato presidencial Salvador Nasralla.
| Mesas de trabajo
Las partes formaron cuatro mesas sectoriales para tratar sobre derechos humanos, reformas institucionales, crisis política y reformas electorales.
|
“La desconfianza de los actores políticos ha sido más fuerte que la voluntad de avanzar hacia un diálogo”, subrayó el embajador de la ONU visiblemente molesto.
Asimismo, Garafulic recordó que hace seis meses no había el mismo clima político de ahora. “Hoy con mucha pena les tengo que decir que el clima de desconfianza, descalificación mutua ha impedido que instalemos el diálogo político”, lamentó.
Deploró la actitud de los representantes políticos y dijo que el pueblo hondureño no se merece lo que está sucediendo.
“Da mucha tristeza por el pueblo de Honduras, que no se merece lo que hoy ha sucedido. Existe la estructura de un diálogo, existe una agenda de temas para conversar, Naciones Unidas tiene en el país a mediadores y facilitadores listos para arrancar, en este minuto lamentablemente el nivel de desconfianza entre las fuerzas políticas hondureñas hace imposible avanzar”.
Manifestó que le hubiese gustado anunciar la fecha del inicio del diálogo político, pero lamentablemente eso no se ha logrado.
La polémica
Tony García, representante de Salvador Nasralla, adujo que el impasse surgió porque el Partido Nacional pretendía que se le diera una cuarta silla en las mesas de diálogo, lo cual le daba una ventaja junto con el representante del Gobierno.
| Mediadores
Para facilitar el diálogo, la ONU contrató a Ana Catalina Soberanis, la estadounidense Marcie Mersky, el español Salvador Aguilera y el dominicano Javier Cabreja.
|
Además, dijo que su representación aceptó la conformación de seis sillas, dos para el Partido Liberal, dos para el Gobierno y dos para los representantes de Nasralla como una muestra de voluntad de sentarse a dialogar, pero el partido de Gobierno insistió en que fueran cuatro o nada.
“Ellos quieren una silla para Reinaldo Sánchez, del Partido Nacional, una para Juan Orlando Hernández, que serían dos sillas de ellos, contra una de Salvador Nasralla y una para el Partido Liberal, o sea que ellos quieren llegar como jefes del diálogo y llevar la mayoría de dos contra uno”, expresó.
Por su lado, Maribel Espinoza, vicepresidenta del Partido Liberal, culpó a los nacionalistas de impedir que se llegara a un acuerdo para comenzar un diálogo que represente una salida a la crisis poselectoral.
“Ellos han venido a dar una respuesta con galimatías y el Partido Liberal le dice a Honduras que le hemos cumplido, nosotros presentamos una propuesta que incorpora al Partido Nacional y ellos hoy con engaños están diciendo que los estamos excluyendo, lo cual es falso”.
Luis Colindres, del Partido Nacional, dijo que lo único que pidieron en la reunión fue tener la representación como la fuerza más importante en el país. “Esa petición fue denegada por los amigos de Salvador Nasralla y con insultos además calificando hasta de asesino al señor presidente Juan Orlando Hernández”, reveló.
